Un estudio de la Fondazione IRCCS Istituto Neurologico Carlo Besta de Milán demuestra que un tratamiento basado en la atención plena proporciona múltiples beneficios a los pacientes afectados de migraña crónica y dolores de cabeza por uso excesivo de medicamentos. La investigación ha sido divulgada en un artículo publicado por Medscape Medical News .

Licia Grazzi

El ensayo aleatorio MIND-CM, en el que los pacientes siguieron seis sesiones semanales de Mindfulness con una breve práctica diaria, ha comprobado que los enfermos registraron una disminución en la frecuencia de los dolores de cabeza y ganaron calidad de vida. Unos buenos resultados que también redujeron la discapacidad, la pérdida de tiempo productivo, la ingesta de medicamentos y los costes sanitarios derivados del impacto de los dolores de cabeza.

Efectos duraderos

«Hemos detectado mejoras reales en el grupo de pacientes que practicaban Mindfulness. Unos buenos resultados que continuaron siendo evidentes 12 meses después de realizar el estudio, ya que nuestros pacientes aprendieron a utilizar la práctica (de la atención plena) para controlar el dolor», explica la coordinadora del estudio, la doctora Licia Grazzi.

«Por lo tanto -añade la investigadora-, la atención plena debe considerarse como parte del tratamiento habitual de los pacientes con migraña crónica y dolor de cabeza por uso excesivo de medicamentos».

Grazzi señala que varios estudios anteriores ya habían demostrado los beneficios del Mindfulness a la hora de tratar la migraña, pero entre estas investigaciones no había ensayos aleatorios con un tamaño de muestra tan significativa como el del presente estudio y con unos resultados tan bien definidos. El estudio MIND-CM es, hasta la fecha, uno de los más exhaustivos sobre tratamientos conductuales, y el mayor sobre conciencia plena en pacientes con migraña.

Metodología

En esta investigación, 177 pacientes con migraña crónica y dolor de cabeza por uso excesivo de medicamentos fueron asignados aleatoriamente a dos grupos: uno recibió el tratamiento habitual en estos casos (que incluía abstinencia de medicamentos usados ​​en exceso; educación sobre el uso adecuado de fármacos y cuestiones de estilo de vida; y profilaxis personalizada), mientras que el segundo grupo recibió intervención basada en Mindfulness, además del tratamiento habitual.

La intervención basada en Mindfulness consistió en seis sesiones grupales de práctica de conciencia plena de 90 minutos de duración y una práctica diaria individual de 10 minutos. El criterio de valoración principal fue lograr una reducción ≥ 50 % en la frecuencia de los dolores de cabeza a los 12 meses en comparación con el valor inicial. Este resultado lo logró el 78,4% de los participantes en el grupo de atención plena, frente al 48,3% del grupo que solo recibió la atención habitual ( p < 0,0001).

El grupo de atención plena también mostró reducciones significativas, en comparación con el grupo de control, en la ingesta total de medicamento, y además logró con mayor frecuencia una reducción significativa en el impacto del dolor de cabeza, definido por una reducción de 6 puntos o más en la Prueba de Impacto del Dolor de Cabeza (HIT).

Más productividad y menos costes

Asimismo, la práctica de la atención plena condujo a una menor pérdida de tiempo productivo (utilizando una medida que tiene en cuenta tanto los días laborales perdidos como los días trabajados con dolor de cabeza), y redujo los costes sanitarios directos e indirectos de los participantes durante todo el estudio. También se asoció con una mejor calidad de vida y puntuaciones de discapacidad (medidas por la puntuación MIDAS) a los 12 meses.

«En lugar de tratar de cancelar el dolor, tratamos de enseñar a los pacientes cómo soportarlo y cómo manejarlo ellos mismos», explica Grazzi. Otros investigadores, como la doctora Anne MacGregor, especialista en dolor de cabeza y salud de la mujer en el Hospital St. Bartholomew de Londres (Reino Unido), ha destacado que los resultados es este estudio son impresionantes, porque los pacientes incluidos eran particularmente difíciles de tratar.

«Existe un vínculo tan fuerte entre la mente y el manejo de los síntomas de la migraña. En este estudio, las mejoras seguían ahí a los 12 meses, por lo que los pacientes claramente estaban obteniendo beneficios. La atención plena puede devolver el control a los pacientes al brindarles herramientas sobre cómo vivir con la migraña y eliminar el catastrofismo que puede ocurrir cuando ocurre un ataque», ha concluido.