El estrés es uno de los factores que tienen mayor peso a la hora de desencadenar crisis epilépticas. De hecho, dos tercios de los pacientes con esta dolencia identifican al estrés como el principal causante de sus brotes. Por ello, especialistas como el doctor Rodrigo Rocamora recomiendan a estos enfermos la práctica del Mindfulness y de la intervención MBSR para detectar estas situaciones de alteración y hacer frente a las mismas.

Rodrigo Rocamora

En un artículo publicado en Topdoctors.es, el director de la Unidad de Epilepsia del Hospital del Mar y de la Unidad de Epilepsia y Sueño del Hospital HM Delfos (ambos en Barcelona) explica que numerosos estudios han demostrado que una disminución de los niveles de estrés se traduce en una reducción de la frecuencia de las crisis. “En estos casos, se puede llegar hasta reducir la carga de fármacos que un paciente necesita para controlar la enfermedad”, afirma.

Reacción adaptativa

El doctor Rodrigo Rocamora recuerda que el estrés es una reacción adaptativa del organismo que afecta factores biológicos, psicológicos y conductuales frente a una reacción de cambio o amenaza. “En sí mismo –explica-, el estrés no es negativo, ya que es simplemente un mecanismo de defensa a través del cual hemos podido sobrevivir a través de la evolución como especie”.

Este especialista destaca que el problema consiste en que esta reacción fisiológica puede transformarse en una reacción patológica, llamada también estrés negativo, que se produce cuando una persona está sometida a un estrés constante durante un largo período de tiempo.

“Para la persona no es posible mantener esta reacción de alerta constante y se comienza a producir un desgaste en el cuerpo y la mente. Es aquí cuando aparecen fenómenos como la ansiedad, la disforia o las reacciones depresivas tan características de nuestra vida moderna”, agrega Rocamora.

Incertidumbre limitante

En el caso de la epilepsia como enfermedad, uno de los elementos que más afectan a los pacientes es la impredecibilidad de las crisis. Es decir, no saber en qué momento o situación pueden ocurrir. Este especialista destaca que esa incertidumbre limita la capacidad de los pacientes para hacer una vida normal y causa una reducción de la calidad de vida.

“Para los pacientes con epilepsia -insiste el doctor-, es fundamental primero detectar en qué medida el estrés facilita la aparición de crisis, y si este es el caso, desarrollar técnicas y estrategias que permitan mitigarlo”, como el programa MBSR (reducción del estrés basada en mindfulness, en sus siglas en inglés).

Con esta intervención psicoeducativa de 8 semanas se entrena y cultiva la conciencia plena o Mindfulness, de manera que cada participante pueda potenciar su resiliencia. El programa MBSR ayuda a desarrollar recursos internos con los que afrontar de forma eficaz el estrés, el malestar o el dolor, con el fin de aprender a responder a los desafíos en lugar de reaccionar de forma descontrolada a ellos.