Un equipo de investigadores de la University of South Australia ha demostrado los beneficios de practicar mindfulness en el trabajo a diario y recomienda que, además, se ofrezca a los empleados “intervenciones de formación que desarrollen habilidades fuera del entorno laboral”.
Para llevar a cabo este estudio, los investigadores exploraron un mecanismo cognitivo y otro emocional con el fin de averiguar los efectos del mindfulness en el trabajo. Con esta metodología demostraron que, los días en los que los trabajadores experimentan un mayor estado de atención plena, también tienen una mayor satisfacción laboral a través de niveles más altos de estados de ánimo positivos.
En el estudio, los profesores Danielle N. Forjan, Michelle R. Tuckey y Yiqiong Li subrayan que la atención plena “está emergiendo como una construcción valiosa dentro de las ciencias organizacionales para mejorar el funcionamiento organizacional y de los empleados”. Los autores del trabajo han identificado dos mecanismos a través de los cuales el Mindfulness puede producir sus efectos saludables: mediante la confianza en la resolución de problemas y a través del fomento de estados de ánimo positivos de alta activación, como el entusiasmo y la felicidad.
Metodología de estudio
Para llevar a cabo la investigación, los científicos de la Universidad de Adelaida estudiaron a un grupo de 57 empleados australianos a tiempo completo o parcial, que trabajaban en diversas ocupaciones durante 30 horas o más cada 15 días. Ninguno de los voluntarios estaba recibiendo tratamiento por problemas de salud mental en el momento del estudio.
Los voluntarios y voluntarias procedían de campos ocupacionales muy variados (enseñanza, finanzas, administración, gestión) y tenían una experiencia promedio en su puesto de trabajo de más de 6 años. La media de edad era de 40,7 años y las mujeres eran mayoría en el grupo.
Los participantes respondieron primero una encuesta de referencia confeccionada por los investigadores y luego completaron diariamente una entrada en un diario personal inmediatamente después del trabajo durante dos semanas. En esos escritos, valoraban a nivel emocional y cognitivo su jornada laboral, sus emociones durante la misma y los resultados profesionales que habían conseguido.
Escalas e indicadores
Con este material, los investigadores utilizaron diferentes indicadores y escalas de evaluación psicológica y emocional para medir el estado de atención plena de los empleados durante sus jornadas laborales, la calidad del desempeño de sus tareas, su capacidad de resolución de problemas, así como su satisfacción laboral en cada una de las jornadas.
Para medir los estados de ánimo, se utilizó el Indicador Multi-Afecto (Warr et al., 2014). En una escala de 1 = nunca a 7 = siempre, los participantes calificaron 16 estados de ánimo positivos y negativos de alta y baja activación, incluidos «entusiasta» y «alegre», para el positivo de alta activación (HAPA); «relajado» y » a gusto”, para el positivo de baja activación (LAPA); “tenso” y “preocupado”, para el negativo de alta activación (HANA), y “deprimido” y “abatido”, para el negativo de baja activación (LANA). Para medir el estado de ánimo diario, el formato de respuesta siguió el de Rodell y Judge (2009), evaluando los estados “en este momento” en una escala de 5 puntos (1 = nada, 5 = mucho).
Este estudio ha descubierto que los estados de ánimo “entusiasta” y “alegre” por sí solos “llevan el estado de ánimo de la atención plena a la satisfacción laboral”. En otras palabras, los días en los que los empleados se sienten más conscientes, experimentan niveles más altos de esas experiencias emocionales positivas momentáneas, lo que a su vez promueve una mayor satisfacción laboral ese día.
Mejor desempeño de las tareas
En segundo lugar, confirmaron que la atención plena diaria “conduce a un mejor desempeño en las tareas diarias, a través de una mayor confianza en la resolución de los problemas” en el entorno laboral. Es decir, los días en que los empleados experimentan una mayor atención plena, también se sienten seguros acerca de la precisión y eficiencia de su resolución de problemas en el trabajo (en relación con sus propios niveles promedio en estas variables).
Los investigadores destacan que el Mindfulness permite que las personas sean capaces de percibir la experiencia sin identificarse demasiado con ellas; ver los estímulos internos y externos de manera objetiva y no reflexionar sobre el pasado o el futuro.
Actitud abierta
“Es probable, -añaden los profesores- “que esta actitud abierta y presente hacia los problemas conduzca a beneficios en el desempeño de la tarea”, como muestra su investigación. “Este hallazgo apunta a una importante línea de investigación futura, ya que hasta ahora se había pasado por alto el potencial de la atención plena para mejorar los procesos cognitivos en el lugar de trabajo. Nuestros hallazgos sugieren que ésta es un área de investigación que vale la pena”, apuntan.
A modo de conclusión, los investigadores australianos destacan que su enfoque se ha centrado en las variaciones naturales en el estado de atención plena del día a día y subraya la importancia de cultivar el estado de atención plena en el trabajo, en lugar de simplemente emprender un entrenamiento o práctica de atención plena fuera del entorno laboral, que es el enfoque actual predominante.
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