El Mindfulness no solo tiene beneficios a nivel psicológico y emocional, sino que también puede ser una intervención eficaz para reducir la presión arterial alta. Así lo demuestra un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Brown (Estados Unidos) que se ha presentado recientemente en las Sesiones Científicas 2022 de la Asociación Americana del Corazón, celebradas en la ciudad de Chicago.
En la investigación se impartió una intervención de Mindfulness de 8 semanas (tipo MBSR) que enseñó a los participantes a aplicar esas habilidades para tener relaciones saludables con su dieta, actividad física, consumo de alcohol, adherencia a la medicación y estrés. Según los resultados del estudio, la conciencia plena fue determinante para que los voluntarios mostraran medidas de presión arterial sistólica (número superior) notablemente más bajas seis meses después de participar en el programa.
Entrenamiento de habilidades
La intervención de Mindfulness se centró en el entrenamiento de los participantes en habilidades como el control de la atención, la autoconciencia y la regulación de las emociones, y luego se aplicó ese entrenamiento al cambio de hábitos y comportamiento en materia de salud. El autor principal del estudio, el doctor Eric B. Loucks, considera que este enfoque puede ofrecer una forma novedosa de mejorar el control de la presión arterial.
“La atención plena es una conciencia sin juicios de valor, en el momento presente, de las sensaciones físicas, las emociones y los pensamientos”, ha explicado Loucks. El Mindfulness, según este investigador, también implica el concepto de recordar o, en otras palabras, traer la propia sabiduría al momento presente.
“La sabiduría en el contexto de los niveles elevados de presión arterial puede incluir el conocimiento de que las prácticas basadas en la evidencia, como la actividad física, la dieta, el consumo limitado de alcohol y el cumplimiento de la medicación antihipertensiva, pueden mejorar el bienestar”, ha añadido Loucks.
Ensayo clínico
Este ensayo clínico, realizado entre junio de 2017 y noviembre de 2020, incluyó a más de 200 voluntarios reclutados en el área de Providence (Rhode Island), que tenían una presión arterial elevada/alta, definida como superior a 120 mm Hg de presión arterial sistólica u 80 mm Hg de presión arterial diastólica. El 59% de los participantes eran mujeres y el 41% hombres, mientras que la edad media era de 59 años.
Los participantes fueron asignados aleatoriamente a dos grupos, uno de control, que participó en una sesión de orientación grupal, y otro que recibió a la intervención de Mindfulness basada en los estándares y protocolos del programa MBSR: Ocho sesiones grupales semanales de 2,5 horas y a un retiro grupal de un día de duración. La práctica de Mindfulness recomendada en casa era de al menos 45 minutos al día, seis días a la semana.
Resultados
A los seis meses, los voluntarios asignados al grupo de Mindfulness tuvieron un descenso medio de la presión arterial sistólica de 5,9 mm Hg, mientras que en el grupo de control esa disminución solo fue de 1,4 mm Hg. No hubo cambios notables en las medidas de la presión arterial diastólica en ninguno de los dos grupos.
Los participantes en el grupo que asistió a la intervención de conciencia plena también consiguieron reducir el sedentarismo en una media de 351 minutos a la semana en comparación con sus compañeros del grupo de control. Y cuando los investigadores analizaron los cambios en la dieta, comprobaron que los voluntarios entrenados en Mindfulness eran más propensos a comer alimentos saludables para el corazón.
Crec que tot el que s’explica en aquest article em sembla molt interessant, tot i que jo com a persona hipertensa que soc, vigilo la meva dieta, intento tenir una pauta més o menys rigorosa d’esport i en general un estil de vida saludable per mantenir la meva pressió sistòlica controlada, la diastòlica qualsevol metge et pot dir que només es pot regular amb medicació. Però sincerament no sé si mai he tingut una consciència gaire plena del que faig, simplement em cuido per poder tenir una qualitat de vida millor. Sembla ser que tot ha de passar pel Mindfulness, i que en els últims 40 anys hem descobert les sopes d’all. Totes les filosofies tant orientals com occidentals amb més de 2000 anys d’història ja parlaven d’això i recordem que l’estrès és un invent post-modern perquè la humanitat en general ja no hem de patir per la nostra subsistència bàsica. Com essers humans som magnífics, quan no tenim autèntics mals de cap ens els hem de cercar, dubto que siguem l’espècie superior com fa temps que ens diuen.